Aunque las bolsas para sorber han dejado de preferirse en los distritos escolares, cada vez más cafeterías están empezando a solicitar bolsas bag-in-box a granel como una manera de reducir su huella ambiental. «En realidad ha sido en los últimos 15 a 16 meses que el interés ha llegado a la superficie» para leche en bolsas BIB en las escuelas primarias, dice Scott Dissinger, representante de la firma de investigación de lácteos Dairy Management Inc. Cada bag-in-box está cargado en un dispensador refrigerado conocido como vaca de acero. Los estudiantes vierten su propia leche en una taza reutilizable. El formato trabaja mejor para escuelas cuyos estudiantes se reúnen en una cafetería tradicional en vez de comer en sus aulas.
Escuelas en Washington, Oregon, Vermont, y Virginia han adoptado la vaca de acero. Según Dissinger, a los estudiantes les gusta el formato de autoservicio y el poder personalizar su leche – quizá mezclano diferentes ratios de chocolate con leche. Algunos estudiantes también creen que la leche sale más fría que en el cartón tradicional. No perjudica el que el sistema a granel reduce el desperdicio de alimentos y envases. Todas estas piezas están ayudando a impulsar un resurgimiento en la bolsa de leche a granel de 5 galones, el cual ha sido básico en las cafeterías universitarias, comedores y en cruceros durante al menos 30 años. Al ajustarse la industria láctea a satisfacer la demanda para la leche bag-in-box, los niños en todo EE. UU. podrían empezar a ver menos cartones y más vacas de acero.
